Una de nuestras principales prioridades es que cada niño reciba una educación completa, que le allane el camino hacia un futuro fuera de la pobreza. Enviamos a los niños a la escuela primaria, les proporcionamos tutoría para que alcancen el nivel de grado y pagamos para que vayan al instituto. Cuando los adolescentes quieren ir a la universidad o a una escuela técnica, nuestro hogar y los padrinos pagan la matrícula. Más información sobre cómo apadrinar a uno de nuestros estudiantes.

Nuestros antiguos alumnos se han convertido en abogados, profesores, psicólogos, trabajadores sociales, contables, secretarias bilingües y cocineros. Algunos son pastores y evangelistas.